30 días para el pitazo inicial de River en Lumen Field

Faltan 30 días para el inicio del Mundial de Clubes para River. Cuando en el Lumen Field se escuche el pitazo inicial ante el Urawa Red Diamonds, este relator con más de 1500 partidos de River transmitidos y sus 35 años de pasión riverplatense ininterrumpida con River Monumental, quieren estar ahí. Apoyame.

Me decía mi productor digital, el otro día, que consultando en chat GPT y cruzando algunos datos históricos, llevo relatados unos 1500 partidos del Más Grande desde que inicié mi carrera como relator riverplatense allá por 1991 con una victoria de River ante Racing en los ya extintos torneos de verano de Mar del Plata.

¡1500! La cifra me asusta. Pasaron tantas cosas... cambió el país y también el mundo en estos 35 años. Pasó mucho en la vida institucional y deportiva de River. Nos caímos (River y yo) y nos reinventamos. Alcanzamos la gloria varias veces después de haber mordido la lona. Así es el fútbol y así es la vida. En 35 años tuve y tengo el privilegio de ligar mi vida a la de River. Con más alegrías que sinsabores, claro.

Como en el libro que escribí y me tocó presentar virtualmente en plena pandemia: "Mi Vida con River", todo un resumen de una vida profesional y sentimental ligada ya definitivamente al millonario "hasta el final de nuestras vidas", como prometí aquella tarde lluviosa en la que un tal Ariel Ortega, de Jujuy, me hizo jurarle amor eterno a él, pero también a la camiseta.

Mi vida terminará, pero junto a River. La de River seguirá para siempre, porque River es eterno, como les dijo Amadeo Carrizo micrófono en mano a los más de 100 asistentes a la fiesta que hicimos en el Sheraton por los 10 años de River Monumental. Ya hacen 25 años.

1500 partidos... y por lo menos dos relatados ante equipos japoneses se me vienen a la mente ahora: un 3 a 0 al Gamba Osaka para levantar la Suruga Bank con el equipo de Napoleón en 2015, semanas después de haber ganado la Libertadores tan especial de ese año y tras un viaje larguísimo; y también otro viaje larguísimo, esta vez en 2007, para un trofeo amistoso en Corea donde también enfrentamos al Lyon de Francia que terminaría siendo el campeón. ¡Y claro! También en ese 2015 de tantos viajes la victoria ante el durísimo Sanfrecce Hiroshima para llegar a disputar la final ante Barcelona cuando Japón se vistió de River.

Y ahora, también quiero sumarme a un viaje que parece larguísimo para llegar a Los Ángeles y luego ir hasta Seattle, con la ilusión intacta de relatar el debut millonario ante Urawa Red Diamonds, acompañando con todas las ganas este nuevo episodio de la película de Gallardo como entrenador de River, con la ilusión de poder relatar las jugadas de nuestro diamante de Azul, Franco Mastantuono y los jugadores del plantel millonario que nos representa.

Una ilusión que me condena. Que no me deja descansar, para seguir con River hasta el final.

Una ilusión a la que le queda un mes y a la que te podés sumar donando y apoyando en www.costafebremonumental.com.ar

Pero también compartiendo, invitando y dándome aguante en las redes sociales de Costa Febre Monumental durante todo este mes para llegar al objetivo de un viaje más y un evento Monumental para este relator.

35 años y más de 1500 partidos después, vamos por más River Monumental #hastaelfinaldenuestrasvidas